Kellogg abastecerá al país desde México
Aunque para los cereales el cierre de producción se hará de forma paulatina, hasta finales de noviembre, la línea de producción de las barras será la primera en trasladarse al país vecino.
Inversiones están en riesgo por crisis política del país
La baja en el envío de remesas ha causado percepción de riesgo.
La mayoría de guatemaltecos dijeron estar enterados de la crisis económica y financiera mundial, sin embargo, los resultados de una encuesta reflejan confusión entre la situación originada en Estados Unidos y el alza de productos derivados de los precios del petróleo.
La Encuesta Nacional Crisis Financiera Mundial, llevada a cabo por Vox Latina para Prensa Libre, refiere que el guatemalteco tiene noción de dicha crisis, pero aún no percibe sus efectos.
Según la encuesta, el 94.4 por ciento de los guatemaltecos manifestó estar enterado de la crisis económica y financiera mundial, y el 62.1 por ciento dijo estar consciente en qué consiste, sus causas y sus consecuencias.
Sin embargo, los analistas en economía indican que con base en los resultados, lo que los guatemaltecos resienten como efectos de la crisis financiera son, en realidad, las consecuencias de los altos precios del petróleo, que es una problemática distinta, además de la situación de la economía nacional causada por la falta de empleo.
El 21.6 por ciento de los encuestados afirmó que la crisis les ha afectado por el aumento de precios; el 13.4 por ciento, en el alza de la canasta básica y, en tercer lugar, con 13.2 por ciento, la falta de empleo en el país.
Además, el 65.3 por ciento puntualizó que serán los pobres el grupo económico que se verá más perjudicado, mientras que un 9 por ciento opinó que impactará a todos los guatemaltecos.
Hugo Maúl, analista del Centro de Investigaciones Económicas y Sociales (CIEN), aseguró que no le extraña las respuestas de los guatemaltecos, porque en el país no se han sentido con fuerza los efectos de los problemas financieros mundiales, originados en EE. UU. y que han llegado a recesión en varios países.
Esa visión es compartida por el analista Rubén Darío Narciso, de la Asociación de Investigaciones y Estudios Sociales (Asies).
A los analistas les llama la atención que, aunque la mayoría de encuestados (79.7 por ciento) confirmaron que ya les está dañando la crisis, y el 88.9 por ciento indicó que les podría alcanzar en los próximos meses, menos de la mitad (46.7 por ciento) ha pensado tomar alguna medida para evitar las consecuencias.
Para Maúl, el pesimismo que muestran los encuestados tiene varias aristas. Éstas, según él, son, por ejemplo, que el Gobierno actual hizo promesas grandes y desorbitadas como la creación de miles de empleos, aspecto que por las condiciones económicas locales no se ha cumplido.
Otro punto que el ejecutivo señaló, y que presentaron los datos de la encuesta, es que el 86 por ciento de las respuestas reflejaron que es el Gobierno quien debe emitir más medidas para evitar la crisis, y el 73 por ciento argumentó que el Gobierno “no ha hecho mayor cosa ante la gravedad de la crisis económica y financiera”.
Para el analista de Asies, las opiniones vertidas en la encuesta de Vox Latina, “dejan una gran sensación de que Guatemala está desprovista de todo tipo de herramientas o acciones para enfrentar la crisis”.
Narciso agregó que se hace mucha referencia a que debe ser el Gobierno quien tome el control de la situación, pero afirmó que las acciones que recomiendan los guatemaltecos no tendrían un gran impacto como solución frente a la crisis.
A la pregunta: ¿En qué podría ahorrar el Gobierno?, el 13.1 por ciento aseguró que bajar el sueldo a los funcionarios; 12.4 por ciento, evitar viajes de los servidores públicos y el 8.8 por ciento, bajar el sueldo a los diputados. Otras respuestas fueron la de reducir los gastos del Estado, que se minimice el número de parlamentarios y controlar la corrupción.
Ambos analistas coinciden en que lo que el Gobierno puede hacer es controlar la estabilidad de precios y garantizar la generación de empleo.
Añadieron, además, que el impacto en el país de la recesión en Estados Unidos aún está por venir, y que sus efectos se verán en la baja de las exportaciones, el menor ingreso de remesas, menos créditos y la baja en el consumo, así como mayor desempleo.
En cuanto a las consecuencias de la mala situación financiera en Estados Unidos, los analistas manifestaron que el país es menos vulnerable, ya que no hay una fuerte operación bursátil y de inversión, así como escasa presencia de banca extranjera.
En el tema bancario, el 47.3 por ciento de los encuestados advirtió tener actualmente problemas para la obtención de un crédito para consumo.
En este caso, Maúl consideró que una de las razones es la contracción de la tasa de crecimiento del crédito al sector privado, debido a las acciones tomadas por la Junta Monetaria.
Agregó que estos problemas se han visto más pronunciados en el área rural (57.3 por ciento) debido a la percepción de riesgo ante la actual baja en el envío de remesas.
Bajaría consumo
De los pocos guatemaltecos que aseguraron que tomarían medidas para evitar el impacto de la crisis en su presupuesto, la mayoría, un 32.21 por ciento, mencionó que bajarán su consumo de diferentes formas.
Por ejemplo, 13.68 por ciento, economizará y ahorrará; 12.68 por ciento, gastará menos, y el 5.97 por ciento, será austero, y otros más reducirán su presupuesto.
Otra medida es trabajar al doble para ganar más dinero o buscar otro trabajo para obtener otros ingresos.
Mientras el área urbana piensa más en ahorrar y disminuir gastos, en el área rural también ven la necesidad de encontrar otro empleo.
La visión es diferente si se trata de las medidas que las empresas, a criterio de la percepción de los encuestados, llevan a cabo. Los resultados afirmaron que la principal medida es la reducción de empleos, seguida de bajar costos.
“El ajuste que la gente está pensando es reducir el consumo, además de ver la posibilidad de ingresos adicionales o de otros trabajos. Ahí es donde la cosa se pone fea porque se podría contraer, más el crecimiento económico”, refirió Maúl.
También le parece razonable el hecho de que quienes más bajos ingresos tienen son quienes menos han pensando en hacer algo al respecto, ya que sus recursos alcanzan solo para gastos básicos, como alimentación y servicios.
La encuesta expuso que las personas de altos y medianos ingresos son las que más han pensado en tomar medidas, y si la acción principal es disminuir el consumo, en el momento en que lo hagan, el impacto que ya se percibe en la economía nacional se agregarán otros efectos adicionales que empeorarán el panorama.
Narciso confirmó que los resultados de la encuesta hecha por Vox Latina a los ciudadanos son similares a los que Asies ha obtenido. Las encuestas llevadas a cabo por Asies afirmaron que las empresas tienen poco campo de acción, y entre las opciones que les quedan están la reducción de empleos y la no contratación de más trabajadores. 12-01-2009 12:00 P.M. wii
Se reporta nueva caída en remesas
14-11-2008 A octubre de 2008, los envíos habían subido un 6%, pero en el mismo período del año pasado eran de un 14.4%. El ritmo en el crecimiento de las remesas que los guatemaltecos que emigraron, principalmente a Estados Unidos, envían al país, resintió una nueva caída en octubre.
Según datos del Banco de Guatemala (Banguat), el pasado mes ingresaron $361 millones, una cifra menor en $10.8 millones (-2.9%) a los $371.8 millones de septiembre.
No obstante, en volumen de divisas, en los 10 meses de este año se ha recibido un total de $3,657 millones, un monto superior en $206.8 millones (6%) al del mismo lapso de 2007, cuando llegó a $3,450.2 millones.
Un estudio de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) preveía el mes pasado que el ingreso de divisas por este rubro en 2008 sería de $4,393.5 millones.
Sin embargo, el crecimiento del 6% de las remesas a octubre es menor al 14.4% registrado al mismo mes de 2007, y más alejado aún del 22.8% de hace dos años (lea: A menos de la mitad).
El más bajo
La evolución de las remesas es el más baja de los últimos 7 años, según las cifras del Banguat. En 2002 registró un incremento del 155.2%, para luego caer a 35.9% en el período siguiente. De 2004 a 2006, el comportamiento muestra una estabilización entre 17.9% y 22.8%, y después iniciar su de-scenso.
Julio García Motta, director de Consultores para el Desarrollo (Copades), considera que esa caída en el crecimiento es un reflejo de que la crisis financiera mundial ya está afectando al país.
Para el analista, la tasa del 6% de desempleo que afecta a los estadounidenses en su nación, si bien no es la más alta de los últimos años, sí reduce los ingresos de los migrantes.
Refiere que en California un 8% de personas no tiene empleo, y es precisamente la zona donde se encuentra el 35% de guatemaltecos.
Debido a este comportamiento es que la población se encuentra a la expectativa de conocer cuáles serán las medidas que podría adoptar el nuevo mandatario norteamericano en materia migratoria (lea: De manos atadas).
DE MANOS ATADAS
Según el analista José Raúl González Merlo, el futuro presidente estadounidense, Barak Obama, tiene un margen de acción muy limitado, en especial por la crisis financiera que le hereda el actual.
Conociendo su ideología (la del próximo mandatario norteamericano), expresa González, Obama “debería amagar con la izquierda, pero patear con la derecha”.
El monto promedio que los chapines envían desde Estados Unidos es de $345 mensuales, indica un estudio de la OIM.
La investigación determina que el 47.5% del volumen de las remesas se utiliza para el consumo de los familiares en Guatemala.
Inestabilidad se apodera de Wall Street
Nueva York. La inestabilidad recorrió nuevamente los mercados financieros ayer, al incrementarse el nerviosismo del mercado con relación a un plan gubernamental para adquirir US$700 mil millones en deuda hipotecaria de los bancos.
Los inversionistas volvieron a generar un desplome en las acciones, empujaron el crudo a un alza de US$16 el barril, e impulsaron el oro aún más arriba, mientras buscaban un lugar seguro para proteger su dinero.
De acuerdo con un borrador obtenido por la agencia de noticias The Associated Press, el proyecto de ley también dice que los jueces podrían cambiar los términos de las hipotecas, para rebajar los pagos mensuales de los dueños de casas que estén arruinados.
También ordena a las compañías que limiten los salarios de ejecutivos de empresas en quiebra, o sumidas en grandes dificultades.
Los inversionistas no saben si el plan del gobierno de descongelar los mercados de crédito y retomar el todavía débil mercado de la vivienda tendrá éxito.
Entretanto, el Grupo de los Siete, que representa a las principales naciones industrializadas del mundo, prometió ayer hacer todo lo posible para ayudar a Estados Unidos a paliar la crisis.
Mal comportamiento Wall Street no respondió muy bien al acuerdo. El índice industrial Dow Jones bajó más de 370 puntos, mientras los inversionistas buscaban seguridad en activos más fuertes como el oro y el petróleo; éste último llegó a ganar más de US$25 por barril, en un momento dado de la sesión.
El crudo ligero con bajo contenido de azufre para entrega en octubre llegó a subir hasta US$25.45, a US$130 por barril, en el Mercado Mercantil de Nueva York (Nymex), antes de retroceder para establecerse a US$120.92, con ganancia de US$16.37.
El precio del oro subió más de US$40.30, para colocarse en US$909 por onza Troy.
Los inversionistas están aliviados de que las autoridades federales están tomando medidas para hacer que los bancos de la nación puedan deshacerse de sus activos peligrosos, pero Wall Street no está segura aún sobre qué tan exitoso será el plan para apuntalar los mercados crediticios, de los que dependen muchos negocios para financiar sus operaciones, y para respaldar el aún golpeado mercado de la vivienda.
Los indicadores más amplios del mercado también retrocedieron: el índice Standard & Poor’s bajó 47.99 puntos; el 3.82 por ciento, a mil 207.09; mientras que el compuesto Nasdaq perdió 94.92 unidades, o 4.17 por ciento, a dos mil 178.98.
Las acciones en baja superaron a los papeles al alza en proporción de cuatro a uno en el NYSE, donde el volumen de operaciones fue de mil 270 millones de acciones negociadas.
El índice Russell 2000, barómetro de las empresas más pequeñas que cotizan en Bolsa, cayó 33,30 puntos, el 4.4 por ciento, a 720.44.
En el mercado de bonos, el rendimiento del papel de la Tesorería a 10 años permaneció sin cambio el lunes, a 3.82 por ciento, con respecto a su cierre previo.
En cuanto a otros mercados extranjeros, el índice FTSE 100 de la Bolsa de Londres cerró con una caída de 1.41 por ciento, el barómetro DAX de Alemania retrocedió 1.32 por ciento y el CAC 40 de Francia bajó 2.34 por ciento.
En Asia, el índice Nikkei 225 de Japón cerró con un alza de 1.42 por ciento, mientras que el Hang Seng de Hong Kong cerró con un avance de 1.58 por ciento.
En Internet:
Bolsa de Valores de Nueva York: http://www.nyse.com
Bolsa tecnológica Nasdaq: http://www.nasdaq.com
AP